En uno de los armarios de mi casa descansa esta caja de madera. Una simple caja de puros, que para mi es mucho más que eso.
Para mi es el baúl de la memoria. Recuerdos ...todos ellos relacionados con el vino.
En esta caja guardo y atesoro mi colección de etiquetas de vino. Una colección empezada muchos años atrás y una colección que tiene una particularidad:
Sólo guardo etiquetas de botellas que me he bebido.
Personalmente creo que la estética de las etiquetas de vino es todo un mundo y conseguir una botella "bien vestida" es algunas veces un reto.
Muchas estas etiquetas me hacen recordar momentos y personas con las que he compartido una botella de vino.
Algunas etiquetas representan para mi momentos difíciles y complicados... pero echando la vista atrás y repasando las etiquetas que van apareciendo y que creía olvidadas, he de decir que en esta caja hay más alegrías que tristeza.
La pena es que hace mucho tiempo que no añado nuevas etiquetas a mi colección... y desde luego no es que ya no comparta botellas. La realidad es que desde hace algunos años, las bodegas / imprentas han cambiado el tipo de papel y de pegamento, y ahora no hay forma de sacar una etiqueta entera de la botella.... están pegadas con cemento!!
Hasta hace bien poco, bastaba con el tradicional método de sumergir la botella en agua caliente, y dejarla a remojo una noche.
A la mañana siguiente ...voilá, la etiqueta se había despegado amablemente haciendo el trabajo por ti.
El siguiente paso fue que tras una noche a remojo, había que despegar manualmente la etiqueta con muco, mucho cuidado ....y grandes posibilidades de romper la etiqueta.
Después de eso llegó el fin. Ni con agua, ni con paciencia, ni con cuidado... No hay manera...
Es una pena por que en estos tiempos han pasado grandes vinos por mis manos y por mi copa... y me hubiera gustado dentro de 10 años volver a abrir mi caja de puros y recordar aquellos vinos y aquellos compañeros de copas.
Para mi es el baúl de la memoria. Recuerdos ...todos ellos relacionados con el vino.
En esta caja guardo y atesoro mi colección de etiquetas de vino. Una colección empezada muchos años atrás y una colección que tiene una particularidad:
Sólo guardo etiquetas de botellas que me he bebido.
Personalmente creo que la estética de las etiquetas de vino es todo un mundo y conseguir una botella "bien vestida" es algunas veces un reto.
Muchas estas etiquetas me hacen recordar momentos y personas con las que he compartido una botella de vino.
Algunas etiquetas representan para mi momentos difíciles y complicados... pero echando la vista atrás y repasando las etiquetas que van apareciendo y que creía olvidadas, he de decir que en esta caja hay más alegrías que tristeza.
La pena es que hace mucho tiempo que no añado nuevas etiquetas a mi colección... y desde luego no es que ya no comparta botellas. La realidad es que desde hace algunos años, las bodegas / imprentas han cambiado el tipo de papel y de pegamento, y ahora no hay forma de sacar una etiqueta entera de la botella.... están pegadas con cemento!!
Hasta hace bien poco, bastaba con el tradicional método de sumergir la botella en agua caliente, y dejarla a remojo una noche.
A la mañana siguiente ...voilá, la etiqueta se había despegado amablemente haciendo el trabajo por ti.
El siguiente paso fue que tras una noche a remojo, había que despegar manualmente la etiqueta con muco, mucho cuidado ....y grandes posibilidades de romper la etiqueta.
Después de eso llegó el fin. Ni con agua, ni con paciencia, ni con cuidado... No hay manera...
Es una pena por que en estos tiempos han pasado grandes vinos por mis manos y por mi copa... y me hubiera gustado dentro de 10 años volver a abrir mi caja de puros y recordar aquellos vinos y aquellos compañeros de copas.
2 comentarios:
Comparto tu opinión en el tema de las etiquetas y la estética... Y sí, es una pena que ya no haya manera de despegarlas - estaba toda entusiasmada con lan idea de hacerme un mural-collage para la cocina... y ni por esas... Supongo que es una manera del sector de defenderse contra plagios, otra razón no le encuentro al repentino cambio... Pero es una pena, la verdad... Entre eso y los corchos de silicona (que sí que serán super-mejores), no sé, igual soy yo muy conservadora en ciertas cosas...
saludos capitan, yo tambien colecciono etiquetas, tengo muchos cientos, igual podriamos ponernos en contacto y hablar sobre tecnicas de despegado.
yo tambien colecciono practicamente las que bebo y algunas muy especiales que me dan, antiguas, lejanas...
un saludo.
Publicar un comentario