En el año del señor de 1294 abría sus puertas el convento de la Santísima Trinidad de Lisboa.
El convento pronto se convirtió en refugio para peregrinos y cruzados, que siempre encontraban en él amparo, un vaso de vino y una comida caliente.
Durante cinco siglos, el gran salón del refectorio del convento, no dejó de acoger ni un solo día a visitantes y peregrinos, hasta que en el año 1836, con la extinción de las órdenes religiosas en Portugal, el convento cerró sus puertas.
En ese año el convento se convirtió en la cervecería más antigua de Portugal: "La cervejaría TRINDADE"
En sus salones decorados con azulejo portugués los nuevos dueños han tomado el relevo de la antigua orden religiosa y siguen recibiendo y alimentando a los nuevos "Peregrinos"
Hoy día la cervecería sigue funcionando en el barrio alto de Lisboa y sus propietarios presumen de no haber cerrado un solo día desde hace 170 años. Por respeto por esa magnífica tradición, en la cervejaría Trindade piden a sus clientes que les ayuden a seguir haciendo historia, comiendo bien y bebiendo mejor.
Y allí estuve yo la pasada semana, haciendo historia. Comiendo bien y bebiendo mejor, disfrutando de un local único y lleno de tradiciones.
Dando cuenta de unos estupendos pinchos de carne e vaca y unas cuantas (cuantas??) jarras de Cerveza.
...eso si, tengo que decir que hacer historia es francamente duro, y al final acaba pasando factura.
...y no me preguntéis como!
El convento pronto se convirtió en refugio para peregrinos y cruzados, que siempre encontraban en él amparo, un vaso de vino y una comida caliente.
Durante cinco siglos, el gran salón del refectorio del convento, no dejó de acoger ni un solo día a visitantes y peregrinos, hasta que en el año 1836, con la extinción de las órdenes religiosas en Portugal, el convento cerró sus puertas.
En ese año el convento se convirtió en la cervecería más antigua de Portugal: "La cervejaría TRINDADE"
En sus salones decorados con azulejo portugués los nuevos dueños han tomado el relevo de la antigua orden religiosa y siguen recibiendo y alimentando a los nuevos "Peregrinos"
Hoy día la cervecería sigue funcionando en el barrio alto de Lisboa y sus propietarios presumen de no haber cerrado un solo día desde hace 170 años. Por respeto por esa magnífica tradición, en la cervejaría Trindade piden a sus clientes que les ayuden a seguir haciendo historia, comiendo bien y bebiendo mejor.
Y allí estuve yo la pasada semana, haciendo historia. Comiendo bien y bebiendo mejor, disfrutando de un local único y lleno de tradiciones.
Dando cuenta de unos estupendos pinchos de carne e vaca y unas cuantas (cuantas??) jarras de Cerveza.
...eso si, tengo que decir que hacer historia es francamente duro, y al final acaba pasando factura.
...y no me preguntéis como!
2 comentarios:
Está claro, tengo que volver una vez más a Lisboa.
Hola Juan Miguel!!!
pues si te animas a volver es muy fácil, la tienes en la "nova rua de Trindade", en el barrio alto
Salu2!!
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