Últimamente se me acumula el trabajo....
Hace ya algunas semanas tocaba cena de vinos y todavía no he tenido oportunidad de contarlo... Fue una cena a la que llegué tarde y estresado así que no tengo un recuerdo muy claro de los vinos que probamos.
Fue una cena de vinos del mundo. Había un poco de todo un francés, un chileno, un alemán y un español.... (esto parece un chiste de aquellos que se contaban antes!!)
Los vinos catados fueron los siguientes:
Como he dicho, no fue mi noche, así que para los comentarios he echado mano de Carlos el Gaviero, ya que tengo recuerdos muy vagos de aquella noche (...y no fue por el alcohol)
El vino Chileno nos lo trajo Jens de uno de sus viajes de trotamundos. Mi recuerdo del Montelig chileno, es que estaba muy rico, pero poco más... Eso tan simple, lo resume Carlos de esta manera:
Nariz muy atractiva con toques de hierbabuena, menta y madera (chips) americana, amable y frutoso.. Desconocemos la variedad (la etiqueta NO lo indica) pero lamentablemente casi todos los vinos chilenos (sin importar la variedad) tienen una nariz muy parecida -de diseño- que no refleja el carácter de sus varietales dominantes.
Entrada de boca rica y amplia, buena fruta negra conjuntada con madera, razonablemente largo pero sin carácter mineral (imagino que por gran producción). Buen diseño de vino, pero sin características locales.
Un vino muy comercial, de esos que te dejan siempre con la sensación de: "huuy gran jugada, pero el balón rozó el larguero!!"
Personalmente el vino francés me dejo frió... no le encontré nada especial.
Carlos lo vio así:
St. Emilion (Merlot y cabebernet franc posiblemente)
Cerrado en nariz, con carácter. Tinta china y poco más. En boca mineral, toques vegetales y paso largo.
Muy cerrado en boca pero parecía indicar que ahí había vino (aunque esta noche no salio de la botella). No tenia defectos ni corcho.
El español es un vino de los que no fallan. De hecho ya hablamos de él en la cena del asador Parrilla Argentina.
Un vino simplemente redondo de principio a fin, un vino que tiene de todo y no le sobra nada.
El Riesling rico-rico, toques salados y minerales. Un gran vino. Un Vino de los que me gustan.
En boca ácido pero equilibrado. Fruta y minerales a partes iguales con un toque salado.
Buena estructura. destacar que dio perfectamente la talla después de buenos (y potentes) tintos como el chileno, el St. Emilion y sobre todo el Pago de los Capellanes crianza 2005.
Como resumen de la noche, elegir a los ganadores:
Pago de Capellanes y el Maximin Grünhäuser Abtsberg, riesling.
Dos grandes vinos.
P.D. ...como esa noche NO era mi noche, hasta las fotos están tirando a cutres...
Hace ya algunas semanas tocaba cena de vinos y todavía no he tenido oportunidad de contarlo... Fue una cena a la que llegué tarde y estresado así que no tengo un recuerdo muy claro de los vinos que probamos.
Fue una cena de vinos del mundo. Había un poco de todo un francés, un chileno, un alemán y un español.... (esto parece un chiste de aquellos que se contaban antes!!)
Los vinos catados fueron los siguientes:
Montelig 2004 D.O. Aconcagua Valey (Chile)
Chateau Mayne Reinaud St. Em. Grd. Cru 2000 D.O. Burdeos (Francia)
Pago de los Capellanes 2005 D.O. Ribera de Duero (España)
Maximin Grünhäuser Abstberg 2007 D.O. Mossel-Saar-Ruwer (Alemania)
Chateau Mayne Reinaud St. Em. Grd. Cru 2000 D.O. Burdeos (Francia)
Pago de los Capellanes 2005 D.O. Ribera de Duero (España)
Maximin Grünhäuser Abstberg 2007 D.O. Mossel-Saar-Ruwer (Alemania)
Como he dicho, no fue mi noche, así que para los comentarios he echado mano de Carlos el Gaviero, ya que tengo recuerdos muy vagos de aquella noche (...y no fue por el alcohol)
El vino Chileno nos lo trajo Jens de uno de sus viajes de trotamundos. Mi recuerdo del Montelig chileno, es que estaba muy rico, pero poco más... Eso tan simple, lo resume Carlos de esta manera:
Nariz muy atractiva con toques de hierbabuena, menta y madera (chips) americana, amable y frutoso.. Desconocemos la variedad (la etiqueta NO lo indica) pero lamentablemente casi todos los vinos chilenos (sin importar la variedad) tienen una nariz muy parecida -de diseño- que no refleja el carácter de sus varietales dominantes.
Entrada de boca rica y amplia, buena fruta negra conjuntada con madera, razonablemente largo pero sin carácter mineral (imagino que por gran producción). Buen diseño de vino, pero sin características locales.
Un vino muy comercial, de esos que te dejan siempre con la sensación de: "huuy gran jugada, pero el balón rozó el larguero!!"
Personalmente el vino francés me dejo frió... no le encontré nada especial.
Carlos lo vio así:
St. Emilion (Merlot y cabebernet franc posiblemente)
Cerrado en nariz, con carácter. Tinta china y poco más. En boca mineral, toques vegetales y paso largo.
Muy cerrado en boca pero parecía indicar que ahí había vino (aunque esta noche no salio de la botella). No tenia defectos ni corcho.
El español es un vino de los que no fallan. De hecho ya hablamos de él en la cena del asador Parrilla Argentina.
Un vino simplemente redondo de principio a fin, un vino que tiene de todo y no le sobra nada.
El Riesling rico-rico, toques salados y minerales. Un gran vino. Un Vino de los que me gustan.
En boca ácido pero equilibrado. Fruta y minerales a partes iguales con un toque salado.
Buena estructura. destacar que dio perfectamente la talla después de buenos (y potentes) tintos como el chileno, el St. Emilion y sobre todo el Pago de los Capellanes crianza 2005.
Como resumen de la noche, elegir a los ganadores:
Pago de Capellanes y el Maximin Grünhäuser Abtsberg, riesling.
Dos grandes vinos.
P.D. ...como esa noche NO era mi noche, hasta las fotos están tirando a cutres...
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